jueves, 25 de octubre de 2018

LOS CELTÍBEROS EN EL ALTO ALFAMBRA

Cada mañana, el sol asoma pronto sobre la Muela de Jorcas.


Encaramado sobre la Pedriza y sobre el arroyo del Regajo, muy cerca del pueblo, se levanta este estrecho altiplano. 

Este enclave fue el asentamiento de una comunidad de pobladores, entre los siglos IV y III antes de Cristo. Las crestas rocosas del paraje y su posición elevada dentro del valle, favorecieron su defensa en unos tiempos turbulentos ...


Una comunidad humana que debió de ser muy importante en población, a juzgar por la extensión de la superficie edificada que, en varias fases, ocupó la totalidad del alargado altiplano. Fue, realmente, una ciudadela


Un paseo por la superficie de la Muela, a pesar de los efectos devastadores de la Guerra Civil y de los expoliadores que desde hace décadas la visitan, aún permite reconocer las líneas de los muros de piedra de las viviendas ...

 

y de otros edificios ...


observar restos cerámicos de una sociedad campesina ...


en la que también habría una aristocracia, a juzgar por el hallazgo de un tesoro, un conjunto de pendientes, pulseras y torques en plata y oro que se exhiben en el Museo de Teruel. 


Este yacimiento, no excavado a pesar de su importancia, corresponde a una sociedad en la frontera cultural entre los íberos (que se extendían más hacia el valle del Ebro) y los celtíberos (que lo hacían hacia la cordilllera Ibérica. 

Sobre esos tiempos, esas gentes, esas culturas nos hablará el próximo día 10 de noviembre el arqueólogo Miguel Ángel Herrero, a las 10 de la mañana en el salón de actos del Ayuntamiento de Jorcas


Al término de la conferencia, realizaremos una excursión al propio yacimiento ...


Y, al término, una comida de alforja en buena compañía.

El próximo día 10 .... ¡acércate a Jorcas!

No hay comentarios:

Publicar un comentario