jueves, 29 de noviembre de 2018

EL ARROYO DE SANTA ÁGUEDA

Entre Jorcas y Miravete de la Sierra se levanta una serie de lomas y cabezos que separan los términos y, a la vez, las cuencas hidrográficas del Alfambra y del Guadalope y las comarcas de Comunidad de Teruel y del Maestrazgo.

En la vertiente del término de Jorcas casi todas las aguas se recogen en a través de dos barrancos, el de la Cueva del Vispe (por el norte) y el de las Cañadas (por el sur), que confluyen en el barranco de Santa Águeda, deudor del Alfambra por su margen derecha.

En los últimos años, éste curso de agua se mostraba seco durante la mayor parte del año, fuera de algún episodio tormentoso estival. Es cierto que su cuenca de recepción no es muy extensa y que el sustrato de naturaleza caliza facilita la infiltración del agua.

Estamos en un año húmedo, de los más lluviosos de la última década. Las precipitaciones se han repartido bien a lo largo de 2018 y, especialmente, en el otoño. El pasado 17 de octubre se produjo un episodio de gota fría sobre el Mediterráneo que afectó intensamente a la cuenca del Júcar y a la margen derecha de la del Ebro. En Jorcas estuvo lloviendo intensamente durante todo el día, recogiéndose cerca de 200 L/m2 . Tres días después, cuando ya se había pasado el efecto de la crecida, así de espléndido se mostraba aún el arroyo de Santa Águeda a su paso por el puente de la carretera.


o tras cruzar el mismo, donde se abre el cauce ...


y se conservan los prados frescos ...


Estos cursos de agua de caudal discontínuo que drenan la cabecera del Alfambra son ecosistemas dinámicos y, al tiempo, unos paisajes de gran belleza.

lunes, 26 de noviembre de 2018

JUGANDO CON LAS PLANTAS EN EL COLEGIO DE CEDRILLAS

El juego es una herramienta imprescindible para estimular el aprendizaje durante la etapa de la infancia pues ofrece a los niños y niñas la oportunidad de disfrutar al mismo tiempo que se adquieren destrezas motoras, intelectuales y de comunicación.

Jugar con elementos de la Naturaleza, además, permite comprender mejor el entorno y favorece la autonomía a la hora de divertirse ya que no se necesitan más recursos que los que ofrece el medio.


El juego es, por otra parte, uno de los elementos de la cultura inmaterial de cada comunidad. 

Por eso, desde el Colegio Público de Cedrillas y desde el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra consideramos que podría resultar de interés educativo realizar el taller "Jugando con las plantas"  con los grupos de Educación Primaria que el pasado mes de octubre impartió  Alicia Cirujeda, investigadora del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y coautora del libro "Diviértete con las plantas", con la colaboración de las profesoras y los profesores  de dicho educativo.

Se hicieron tres grupos, por niveles, con todo el alumnado de Educación Primaria. ¡Estuvo genial!


El grupo de 1º y 2º aprendieron como con los frutos de la cardencha ...


se puede jugar a los dardos ...


Las plantas necesitan repartir las semillas y no hay mejor medio que sean los animales los que lo hagan. El fruto de la cardencha, que contiene las semillas, tiene pequeños ganchos que le permiten engancharse en el pelo de los animales y así viajar con ellos.

Nos contó Alicia que estos ganchos dieron la idea para fabricar los cierres de "velcro", ese medio que permite cerrar las zapatillas sin necesidad de atar cordones ...


después hicieron barquitos con hojas de caña ....


observaron cómo se mueve una semilla de avena loca cuando comienza a hidratarse tras meterla en agua unos instantes ...


parecía un insecto ...

   

Y finalizaron construyendo una corona de juncos con adorno de hojas de chopo y de laurel ...


El segundo grupo lo formaron los niñas y niños de 3º y 4º, además, construyeron cadenas de hojas de chopo recién cogidas ...


que les servirán a alguno a ocultar las casetas que se hacen junto al río ...


aprendieron a jugar (¡y disparar!) con un trabuco construido con un trozo de caña y una rama de sarga ...


y a construir barcos con juncos ...


que quedaron preciosos ...


Por último, los mayores de 5º y 6º también construyeron los dos tipos de barcos ...


y como tenían muchas ganas de emplear los dedales y las agujas construyeron varios adornos con hojas de junco ...



Cada cual se llevó a casa sus pequeños trabajos y ... ¡lo disfrutado y aprendido!

jueves, 22 de noviembre de 2018

LA GANADERÍA EXTENSIVA, UNA OPORTUNIDAD

Criar rebaños de ovejas, cabras y vacas ha sido, desde hace siglos, la principal actividad productiva de las tierras del Alto Alfambra. Esta práctica debió ser muy temprana, como sugieren los yacimientos arqueológicos celtíberos de la Val de Sollavientos, un enclave de estricta vocación ganadera, estando sujeta con el paso del tiempo a los vaivenes históricos de las diferentes culturas que por aquí pasaron. 

Vacas de carne en La Salobreja (Monteagudo del Castillo)
La trashumancia fue la herramienta para conseguir que la ganadería entrase en la economía de mercado en el sur de Aragón. La expansión de la Corona de Aragón hacia el litoral valenciano posibilitó unos derechos de pasto durante los meses desfavorables, ofreciendo una segunda primavera, cuando la Sierra carecía de herbajes. De ahí, al desarrollo de la manufactura de la lana mediante la producción de paños y a la especialización de la economía en el eje pasto-oveja-lana. Casi todos los aspectos de estas sociedades y de los paisajes serranos se explican a través de la importancia de esta actividad.

Rebaño de ovejas pastando en los alrededores del pueblo (Monteagudo del Castillo)
La ganadería extensiva está en crisis en las Tierras Altas de Teruel. No es algo nuevo, en realidad su declive ya viene desde el siglo XVIII. Pero en la actualidad, la sensación de crisis es mayor por que a los cambios productivos se les suma la antigua extensa roturación de pastos para su uso agrícola (muchos de ellos de escasa aptitud) y, sobre todo, la profunda crisis social del mundo rural, asociada a la emigración, el envejecimiento demográfico y la despoblación.

Majada de El Villar (Jorcas). Obsérvese el desarrollo de las matas de agrillo por la ausencia de ganado desde hace décadas.
Sin embargo, la ganadería extensiva mantiene un gran potencial en el Alto Alfambra. La sociedad sigue cambiando con rapidez y demanda alimentos de calidad, que además hayan sido producidos en territorios que atesoran valores naturales y culturales. 

Es cierto que son múltiples los problemas que atañen a la cría de ganados en los montes con normativas, mercados y sociedades cada vez más alejadas del campo y de sus valores. Pero en muchos lugares surgen iniciativas para recuperar la presencia de las ovejas, las cabras y las vacas en los campos y en los montes. Y en Monteagudo del Castillo, también.

La Asociación Cultural, la Agrupación Amigos del Pairón y el Ayuntamiento de Monteagudo, con el patrocinio de Quesos El Hontanar, la Comarca Comunidad de Teruel y el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra, han organizado una jornada dedicada a la ganadería y a las posibilidades que tiene en esta localidad (y en las vecinas). 


El Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra es una herramienta de desarrollo a partir de la conservación y valorización del patrimonio cultural que tiene un tema principal, el paisaje rural, y dos ejes, las arboledas de álamos negros trasmochos y la ganadería extensiva. 

Por eso, el próximo día 1 de diciembre, estaremos en Monteagudo del Castillo.

martes, 20 de noviembre de 2018

SEÑALIZANDO

Desde hace un tiempo algunas personas nos preguntan ¿cuándo comenzará la señalización del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra en las carreteras? Es una de las tareas pendientes. Hay tantas ...

No hay señales informativas en los accesos. Lo que sí se hay son los carteles en los accesos a los núcleos urbanos. Así, junto al nombre del municipio y de la respectiva comarca, acompañando a los nombres de los principales monumentos o espacios naturales, se ha incorporado desde hace unas semanas una balda con el nombre del Parque Cultural que informa de la pertenencia al mismo.

Y estos carteles rezan a la entrada de Ababuj ...


Aguilar del Alfambra ...


Allepuz ...

Camarillas ...


Cedrillas ...

En el desvío de Galve ...


En la entrada de Jorcas ...


de Monteagudo del Castillo ...


Y de El Pobo ...


faltando tan solo en el caso de Gúdar, por carecer de señales en la entrada de la localidad.

Comienza la visibilización del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra.

domingo, 11 de noviembre de 2018

UN DUENDE

Caminando en silencio, al alba o preferentemente al atardecer, por cualquier ambiente natural, es fácil sorprender al corzo (Capreolus capreolus), un pequeño cérvido que en pocos años se ha extendido por todo el Alto Alfambra.


Es un mamífero con un peso inferior a 30 kg. El macho presenta unas cuernas que renueva cada año a lo largo del mes de octubre. La hembra carece de ella. Ambos presentan una característica mancha en el pelaje debajo de la cola que resulta fácilmente visible cuando huyen al vernos. El pelaje es más rojizo en verano mientras que en invierno adquiere un tono más grisáceo.


Tiene una dieta herbívora ya que se alimenta en prados, cultivos y brotes de arbustos.

El celo se produce de primavera a mitad del verano, volviéndose entonces los corzos solitarios. Una vez finalizada la época de celo son algo más gregarios, sobre todo mientras cuidan a las crías, que nacen en el mes de mayo. Es característico la voz que emiten los machos, un ladrido que resuena de manera tétrica.

Especie abundante que ha colonizado todos los ambientes de las altas tierras del Alfambra.

Suele vérsele en los bosques de ribera ...


en los matorrales ....


en los peñas y roquedos ...


y en los cultivos ...


La presencia de este mamífero aporta riqueza natural al Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra.

Chusé Lois Paricio
Aguilar del Alfambra

jueves, 8 de noviembre de 2018

EL CHOPO CABECERO COMO RECURSO ENERGÉTICO: USOS TRADICIONALES Y FUTURO DESEABLE


Desde finales de la Edad Media hasta el siglo XIX la economía de las Tierras Altas de Teruel se especializó en la producción de lana. Este producto era destinado tanto a la exportación como, sobre todo, a una industria textil autóctona que llegó a ser muy importante. 

Durante más de quinientos años miles y miles de ovejas llevan pastando los montes y valles de este sector de la cordillera Ibérica. Los bosques originales se transformaron en pastos y tierras de labor, mientras iba surgiendo un acuciante problema para sus gentes. Bueno, en realidad, dos. 

Lomas y rasos de La Sierra (Aguilar del Alfambra)
Por un lado, la necesidad de leña para su uso como combustible. Este problema no se resolvió. Tras la tala de los árboles se siguió con la de los arbustos. Enebros, guillomeras, aliagas y sabinas fueron aprovechados creando, con el tiempo, los paisajes deforestados que pueden verse en las fotos antiguas y que en las últimas décadas comienzan a recuperarse. 

Por otra parte, faltaba madera de obra para la construcción de edificios. La solución fue plantar chopos en las riberas y hacerlos cabeceros. El desmoche regular proporcionaba las necesarias vigas. El rebrote de los vástagos en la cabeza del árbol se producía lejos del acceso del diente del ganado que pacía en su entorno. Una inteligente solución para compatibilizar la ganadería extensiva y la producción forestal. Como complemento, las ramas menores obtenidas tras la escamonda servían como combustible en las glorias domésticas o en los hornos de tejerías o panaderías. 

Chopo cabecero recién podado en Los Collados (Aguilar del Alfambra)
Así, hasta el éxodo rural y la llegada de las vigas de hormigón. Desde entonces, buena parte de los chopos cabeceros fueron abandonados y los que seguían gestionándose lo eran para dedicar las ramas a su uso como combustible doméstico tras hacerlos tarugos. En la actualidad este es el único aprovechamiento económico. Es la única razón que mueve a los agricultores a realizar el desmoche, tan necesario para conservar a estos árboles, así como su valor ambiental y cultural. 

Eras de Jorcas
El uso de combustibles fósiles y la regresión demográfica en el medio rural hacen cada día menos necesaria la leña de chopo cabecero. Una amenaza más para su futuro. 

Mientras tanto, en un cambio de modelo, resurge la biomasa como una fuente energética posible. En un primer momento se consideró el empleo de las ramas de chopo cabecero como materia prima para la fabricación de pellet. No parece ser el camino pues las empresas prefieren el pino. El desmoche manual sobre el árbol requiere además mucha mano de obra y encarece el producto haciéndolo inviable la rentabilidad del pellet. 

Mientras tanto, ¿qué les está ocurriendo a los árboles trasmochos que jalonan las campiñas del centro y oeste de Europa? Antes de abordarlo hay que recordar las diferencias que nos separan. Por un lado, en estas sociedades se aprecian mucho más los valores ambientales y culturales de estos árboles. Por otro, son países con una alta densidad de población en el medio rural por lo que existe gran demanda de leña para uso doméstico en el entorno de estas arboledas. 

En estos países, cuando las ramas de los trasmochos no son muy gruesas y los árboles no muy altos, los propietarios se encaraman a la cabeza con su motosierra y lo desmochan. Las ramas son hechas tarugos con ayuda de la familia o de los vecinos que, entonces, se reparten la leña. 

Desmoche de sauces trasmochos en Flandes (Bélgica)
Cuando los árboles están en espacios públicos (márgenes de carreteras) o tienen grandes ramas cuyo desmoche manual es peligroso o caro se está implantando la mecanización

La tecnología avanza. 

Desmoche mecanizado con tractor oruga en Sare (País Vasco francés)
Sobre una máquina retroexcavadora de uso polivalente se puede instalar un cabezal dotado de grapas y motosierra que, a una altura variable, agarra y corta las ramas de los trasmochos, introduciéndolas después en una trituradora que produce astillas

Astilladora tratando ramas de árboles trasmochos en Sare (Francia)
Estos productos, tras su secado en un espacio cubierto, son utilizados como combustible en sistemas de calefacción de viviendas, granjas o edificios públicos. En algunos países como Francia, se está apostando abiertamente por el cultivo simultáneo de herbáceas y de árboles en una misma parcela, así como por la autonomía energética de las explotaciones agrarias aprovechando los recursos forestales. 

Ribera del Alfambra en Camarillas
Los chopos cabeceros del sur de Aragón constituyen una variante secular de agroforestalismo que tiene todo un futuro en un nuevo marco energético. Hay que encontrar la clave para activarlo.   

miércoles, 7 de noviembre de 2018

PARQUE PALEONTOLÓGICO DE GALVE. 25 AÑOS

Se acumulan los eventos científicos y culturales en el Alto Alfambra. Algunos son muy importantes, como el que se celebrará en Galve el próximo sábado 10 de noviembre: el 25 Aniversario del Parque Paleontológico de Galve y el 60 Aniversario del hallazgo del Aragosaurus

Para conmemorar estos hechos la Asociación Cultural Dinosaurio y la Asociación Cultural Zedazería han preparado este completo cartel:


que se desarrolla mejor en el siguiente programa:



¡Una oportunidad para seguir disfrutando con la Paleontología!